La aplicación de la esencia de lirio en cosmética se conoce desde la Antigüedad. Según la mitología griega, los lirios aparecieron de las gotas que llegaron a la tierra cuando Heras daba de amamantar a Hércules. Sus propiedades hidratantes y antioxidantes se conocen desde aquella época. La esencia de lirio blanco posee una gran capacidad de fijar el agua y retener la humedad. También posee propiedades astringentes que ayudan a cerrar los poros dilataos de la piel, dejándola libre de cualquier imperfección y superhidratada.